Tratado fiscal entre Canadá y los Emiratos Árabes Unidos: aspectos clave para los inversores inmobiliarios
Para los canadienses que invierten en bienes inmuebles en los Emiratos Árabes Unidos, es esencial comprender las implicaciones fiscales de sus operaciones. El tratado fiscal entre Canadá y los Emiratos Árabes Unidos se diseñó para evitar la doble imposición y garantizar un marco fiscal claro. He aquí los principales puntos a tener en cuenta. A continuación encontrará el tratado oficial, seguido del análisis.
Objetivo del acuerdo: evitar la doble imposición
La finalidad del convenio fiscal es impedir que los residentes canadienses tributen tanto en Canadá como en los Emiratos Árabes Unidos por los mismos ingresos. Esto ofrece protección contra la doble imposición, algo esencial para optimizar sus inversiones en el extranjero.
Tipos de impuestos cubiertos
El acuerdo se aplica a los siguientes impuestos:
- En Canadá: impuesto sobre la renta de las personas físicas y sociedades, así como impuesto sobre las plusvalías.
- En los Emiratos Árabes Unidos: impuesto de sociedades e impuestos similares.
Residencia fiscal: cómo se determina
Para determinar dónde es residente fiscal un inversor, el tratado tiene en cuenta varios factores, como el lugar de residencia principal y el centro de intereses económicos. Si esto no permite tomar una decisión, puede utilizarse la nacionalidad como criterio adicional.
Rentas inmobiliarias: normas de imposición
Las rentas procedentes de bienes inmuebles situados en los Emiratos Árabes Unidos son imponibles en ese país, aunque el propietario sea residente fiscal en Canadá. Los ingresos procedentes de bienes inmuebles incluyen :
- Ingresos por alquiler.
- Plusvalías obtenidas por la venta de un inmueble.
Ganancias de capital
Las ganancias derivadas de la venta de bienes inmuebles situados en los Emiratos están sujetas a tributación local. Sin embargo, gracias al tratado, estas ganancias no se gravan por segunda vez en Canadá.
Fiscalidad de dividendos, intereses y cánones
Los dividendos pagados por una empresa de los Emiratos a un residente canadiense pueden estar sujetos a impuestos en los Emiratos. Sin embargo, Canadá concede un crédito fiscal para evitar la doble imposición de dichos ingresos.
Los intereses y cánones, aunque potencialmente se gravan en los Emiratos, también se benefician de un crédito fiscal en Canadá, lo que reduce el impuesto total adeudado.
Cómo elimina el acuerdo la doble imposición
El tratado prevé dos mecanismos para evitar la doble imposición:
- Exención: determinados ingresos percibidos en los Emiratos pueden estar exentos de impuestos en Canadá.
- Crédito fiscal: los impuestos pagados en los Emiratos pueden utilizarse para reducir los impuestos adeudados en Canadá.
No discriminación fiscal
Los residentes canadienses deben recibir el mismo trato fiscal que los residentes en los Emiratos. No pueden estar sujetos a impuestos o gravámenes más onerosos que los aplicados a los residentes locales.
Conclusión
El tratado fiscal entre Canadá y los Emiratos Árabes Unidos ofrece un marco valioso para los canadienses que deseen invertir en bienes inmuebles en los Emiratos. Aclara las obligaciones fiscales, evita la doble imposición y protege los ingresos de los inversores. Al comprender y aplicar las ventajas del tratado, los inversores canadienses pueden gestionar mejor sus obligaciones fiscales al tiempo que maximizan sus rendimientos.
